Es clave anticiparse a las distintas sensaciones que se puedan vivir a lo largo de la carrera.

Correr una maratón es una de las disciplinas más duras que existen. Pero no es una exigencia exclusivamente física, a una altura de la competencia llega un momento en que seguir y terminar la carrera es una cuestión de decisión, disciplina y voluntad.
La carrera en sí no se corre desde la largada sino que se corre desde el primer momento en que la persona toma la decisión y acepta el desafío, incluyendo varios aspectos que van desde lo mental a lo físico, contando con un buen entrenamiento y alimentación y teniendo en cuenta las horas de descanso y recuperación.

“Durante la maratón se sufre, aparecen las tentaciones de abandonar y es allí donde se prueba la fuerza de voluntad. Esa voluntad que se ha fortalecido al realizar fondos previos, solo, sin público, sin puestos de hidratación, escuchando al cuerpo y hasta minimizando algún dolor por miedo a lesionarse” comenta el Lic. Pablo Nigro, psicólogo especialista en deportes.

“Los psicólogos del deporte pueden ayudar a cualquier deportista, que tiene sueños, metas, aspiraciones deportivas, o bien a aquel deportista amateur que convierte el deporte en una práctica disciplinada, que busca logros, además de buenos momentos deportivos y que también puede asesorar a entrenadores y profesores de educación física, árbitros y todos aquellos actores del ámbito deportivo” agrega.

Desde el aspecto psicológico, es muy importante anticiparse a distintas sensaciones que se pueden vivir durante toda la carrera.
En la maratón, como en nuestro cuerpo, la mente sigue un proceso natural de desgaste que se refleja en las distintas etapas emocionales por las que pasamos a lo largo del tiempo que permanecemos corriendo.

Se pueden distinguir seis etapas diferenciadas en distintos kilómetros de la maratón:

• Euforia: Comienza antes de la carrera y dura hasta los primeros kilómetros, es un período de alegría, euforia y entusiasmo. Es posible que aparezca cierta tensión, pero debemos ser muy cerebrales y no dejarnos llevar por la pasión.
• Adaptación: Se extiende desde los 6-7 km hasta los 14-15 aproximadamente. En este momento se empieza a vivir la carrera en si, nos adaptamos a las condiciones de tiempo y a la observación de los demás competidores. Realizamos un test mental de nuestras condiciones físicas.
• Transición: Va desde los 16-17 km hasta los 22-23. Esta etapa es neutra, supone un paso entre la alegría del principio y el comienzo del cansancio físico y mental. Durante este tiempo el corredor permanece concentrado y corriendo a un modo regular.
• Latente: Transcurre desde los 24-25 km hasta los 30-31. En este momento comienza la maratón, una vez que se comienza a sentir el peso de la carrera se empieza a sufrir física y mentalmente. Es en este momento cuando deben aflorar los sentimientos positivos.
• Sufrimiento: Sucede desde el km 32 hasta el km. Comienzan todo tipo de dolores, es importante controlar la ansiedad que genera estar cerca de la llegada.
• Éxtasis: Es el final de la carrera, es el momento que queda grabado para siempre en nuestra mente ya que se han superado todos los obstáculos. El cansancio se torna el dolor más hermoso.

La clave del éxito mental en una maratón radica en anticiparse a las consecuencias. Si se consigue controlar todas las sensaciones que se experimentan durante la maratón, se puede lograr una buena carrera.

Recomendaciones para los 42 km

Antes de la carrera
- Desayunar lo que se esta acostumbrado. No se debe cometer el error de pensar que algo más nutritivo puede hacer la diferencia.
- Planear llegar con tiempo a la competencia y familiarizarse con el lugar.
- No se debe estrenar ninguna indumentaria en la competencia. Se debe utilizar ropa a la que se está acostumbrado.
- Es muy importante hidratarse en todos los puestos, y no pasarse con el agua antes de la carrera. Se debe tener en cuenta que es un recorrido largo.- Ciertos niveles de ansiedad son normales previos a la carrera, esta le permitirá una activación que le generará mayor concentración.

Durante la carrera
- Salir con calma y buscar su ritmo de a poco. No gastar energía de más.
- No contar los kilómetros
- Alentarse y pensar en positivo.
- Disfrutar el momento, relajarse y disfrutar.
- Atravesar el “muro” de los 30 km.
- En los últimos kilómetros buscar imágenes mentales positivas.

Post carrera:
- Disfrutar el logro con sus conocidos y permítase enamorarse.
- Consumir alguna proteína 15 minutos después de llegar e hidratarse.
- Elongar correctamente.
- Acostarse en el piso con las piernas para arriba apoyadas a una pared, esto ayudará a la circulación.
- Realizar una evaluación de la competencia, ya sea del tiempo realizado, de los errores cometidos, la comparación con otros corredores.